¿Por qué es tan frecuente la fractura de pelvis en ancianos?
Una persona mayor puede sufrir una fractura de pelvis como consecuencia de una caída leve en el hogar.
Las personas mayores, por regla general, tienen menos reflejos ante una caída y si están sometidos a tratamientos, por ejemplo, para la depresión o transitorios del sueño, aun tienen menos reflejos. Además, las personas mayores se caen por muchas causas, de desde las alteraciones para caminar, la visión defectuosa, la falta de equilibrio, etc. hasta los accidentes producto de barreras arquitectónicas, como las escaleras sin pasamanos y sin antideslizantes, los desniveles de la acera, la falta de iluminación nocturna para concurrir al servicio higiénico, etc.
El tratamiento de las fracturas de la pelvis en ancianos varía dependiendo de la gravedad de la fisura, pero puede incluir cirugía, medicamentos, reposo en cama y terapia física. Los pacientes con fracturas de pelvis pueden tener dificultad para caminar cuando regresen a casa, así que puedes tomar algunas medidas para ayudarlos.
¿Cuánto tiempo se necesita para recuperarse de una fractura de pelvis?
Si bien la recuperación es lenta y gradual, muchos ancianos pueden iniciar la marcha a los dos días de haberse operado. Claro que esto dependerá del tipo de prótesis instalado y del estado general del enfermo.
Indudablemente, lo preferible es prevenir en la medida de lo posible la fractura de pelvis. La prevención, como en todo, pasa por tratar la mayor cantidad posible de elementos de riesgo para la fractura. Es evidente que no se puede modificar el sexo, la edad, la raza o la historia familiar. Sin embargo, la osteoporosis puede ser prevenida desde mucho antes de hacerse mayor, logrando una buena reserva de calcio en los huesos.
Quizás la mejor forma de prevenir muchas cosas, incluidas las fracturas, es manteniendo una adecuada actividad física, acorde con la edad y características de cada persona.
No se puede dejar de mencionar, la buena y equilibrada alimentación puesto que la desnutrición es otro elemento de riesgo importante para prácticamente todas la enfermedades, y por ende, también para las fracturas y para la mejor recuperación de los operados.
A pesar de todo, si el paciente es propenso a las caídas, a pesar de haber intentado modificar todas sus posibles causas, pueden emplearse protectores de cadera y otros productos de apoyo.
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