Desgravar en la renta los gastos del servicio doméstico

Desgravar en la renta los gastos del servicio doméstico

25-05-2018Itsaso

¿Sabías que en el País Vasco aún no se ha aplicado ninguna ley que permita desgravar los gastos del servicio doméstico para personas mayores?

Nos encontramos ante un tema de actualidad, candente y más que propicio hoy en día, tiempos en los que los pensionistas han salido a la calle para reivindicar unas mejores condiciones de vida, y para denunciar la violencia política que se ejerce sobre sus derechos. Nos encontramos también ante un momento en el que la mejora de las condiciones de trabajo de las empleadas de hogar se encuentra en constante desarrollo.

Ambas cuestiones se unifican si pensamos en los gastos de un pensionista a la hora de hacer frente a un imprescindible servicio de ayuda a domicilio por parte de un cuidador, en muchos casos, contratado ilegalmente. ¿Con qué situación nos encontramos hoy en día en Euskadi? ¿Aumenta la demanda de los servicios de cuidado de ancianos en Vizcaya? ¿Existen ayudas para afrontar el pago por el servicio doméstico? ¿Cuáles son? ¿Qué hay de la desgravación de los gastos en la declaración de la renta?

Desgravar los gastos de la asistencia domiciliaria

Comencemos por el último punto, a modo aclaratorio. A pesar de existir algunas subvenciones para la contratación de cuidadores encargados de la ayuda domiciliaria, y algunas deducciones por contratar una persona que cuide de nuestros hijos, en la mayoría de las comunidades autónomas este tipo de gastos no desgravan ni deducen en la declaración de la renta. Sobre todo, si hablamos de cuidadores que se encargan de las personas mayores y no de los niños: existe una brecha abismal entre ambos servicios.

Sin embargo, la deducción por el cuidado de ancianos no es algo impensable, ya que existe en una parte de nuestro país. Pero, ¿por qué en unas comunidades autónomas sí y otras no? ¿Cuáles son las ventajas y los resultados que se podrían obtener si pudiéramos desgravar (o al menos deducir) los gastos de la asistencia domiciliaria en Vizcaya y otras provincias vascas?

Subvenciones por el cuidado de familiares dependientes

La siguiente aclaración que debemos llevar a cabo se sitúa en la necesidad de diferenciar entre las subvenciones y ayudas recibidas, y la desgravación por la contratación de empleadas de hogar. Existen, en efecto, algunas subvenciones destinadas a la conciliación de la vida familiar y laboral, que comenzaron a llevarse a cabo gracias al decreto de 2012, que estableció las bases reguladoras y la convocatoria de este tipo de ayudas.

La subvención más destacada abarca el 75% o el 100% de la cotización al Régimen Especial de Empleados de Hogar, ayuda que no se pierde aunque el contrato laboral finalice, si es que se sustituye en 15 días al trabajador. Así, una familia que cumpla con ciertos requisitos para recibir la ayuda mencionada, podría recibir 492 euros si la empleada de hogar trabajara 40 horas semanales. Sin embargo, cumplir con los requisitos exigidos es bastante improbable en la mayoría de casos, y no por ello la ayuda es menos necesaria.

Desgravación sin contratación: cuando somos nosotros los cuidadores

La última aclaración ronda en torno a la diferencia entre la desgravación o deducción de nuestros gastos por ser los cuidadores de nuestro familiar dependiente, y la desgravación por los gastos ocasionados por la contratación de una persona empleada del hogar. En el primer caso, sí existe la posibilidad de desgravar los gastos si somos nosotros los encargados de nuestro familiar, pero no para contratar a una persona que se encargue del cuidado. Es decir, en este caso, no estaríamos hablando de contrataciones, por lo que seguiríamos sin tener acceso a la posibilidad de contratar una ayuda a domicilio.

Solo Andalucía contempla la deducción por contratación

Llegados a este punto, hoy en día, solo existe una comunidad autónoma que permite deducir los gastos por la contratación de un cuidador que se encargue de la asistencia domiciliaria y del servicio doméstico en caso de dependenciaAndalucía. Sin embargo, sí existen deducciones y desgravaciones a nivel estatal para el cuidado de niños en comunidades como Castilla y León, Extremadura Galicia. Cumpliendo algunos requisitos, podremos restar un porcentaje (del 15% al 30%, dependiendo de la comunidad autónoma) en nuestra declaración de la renta si contratamos una persona cuidadora de nuestros hijos, menores de 3 o 4 años (dependiendo de la comunidad autónoma). Para el cuidado de personas mayores dependientes, las cosas se complican bastante.

Como decimos, Andalucía permite deducir un importe de 100 euros por persona dependiente, siempre que nos situemos dentro de unos límites de ganancias anuales, entre otros requisitos. Pero además, a diferencia del vacío legal hallado en otras comunidades autónomasAndalucía dedica una parte de sus leyes al derecho a la deducción de los gastos de la contratación de la persona empleada del hogar y cuidadora de las personas mayores dependientes. Así, demostrando la necesidad de terceras personas para cuidar de nuestros familiares, podremos deducir el resultante de la aplicación del 15% a nuestros gastos de asistencia domiciliaria y servicio doméstico, con el límite de 500 euros anuales por contribuyente.

¿Por qué aquí no y en otros lugares sí?

Es entonces cuando nos preguntamos por los motivos por los que en el resto de comunidades autónomas no disponemos del derecho de deducción o desgravación por la contratación de personas empleadas del hogar. Si cumplimos con ciertos requisitos, ¿no es justo poder beneficiarnos de ciertas deducciones cuando vivimos una complicada situación con un familiar dependiente a nuestro cargo? ¿Qué ocurre con las personas mayorespensionistas, que no pueden pagar una asistencia domiciliaria o servicio doméstico con solvencia?

La situación actual de las empleadas de hogar en España

En España hay alrededor de 630.000 empleadas de hogar, y son empleadas, ya que el 90% son mujeres. Sumados los dos motivos (trabajo infravalorado y desigualdad de género), que hacen de éste un sector doblemente subalterno, los resultados en España dejan mucho que desear: el 30,9% de las empleadas de hogar es, hoy en día, víctima de la economía sumergida.

Así, unas 189.777 empleadas están contratadas de forma ilegal, a pesar de la regulación llevada a cabo en 2012, que fomentó la contratación regular del personal doméstico, pero dejando en una situación de precariedad a estas empleadas. En definitiva, los costes de legalización fueron repercutidos, en su gran mayoría, en la empleada de hogar, y no en el empleador. De hecho, a pesar de existir un Régimen Especial de Empleados de Hogar de la Seguridad Social, los derechos distan mucho de los ya logrados en otros sectores; entre ellos, las empleadas de hogar no cobran paro, ni tienen derecho a la prejubilación.

Vergonzosamente, España es el país europeo con más trabajadores domésticos y el único que no comprende el derecho a paro para el personal doméstico en su régimen específico de cotización a la Seguridad Social.

Situaciones económicas desfavorables y la batalla de los pensionistas

Pasemos a otra de las grandes problemáticas a nivel estatal. De forma similar a otras ciudades, en Bilbao, más de un tercio de la población está saliendo a la calle para manifestarse contra la ridícula subida del famoso 0,25% de las pensiones. Detrás del sonado titular, hay todo un arsenal de ideas contrarias a la reforma de las pensiones llevada a cabo en 2013.

Como resultado, muchos pensionistas malviven con ínfimas pensiones, teniendo que ayudar, además, a sus hijos que no llegan a fin de mes. Así, muchos se privan de encender la calefacción o de usar electrodomésticos, llegando a vivir en una auténtica situación de pobreza energética. Más acostumbrados que los jóvenes a administrar los bajos sueldos, las pensiones de 600 euros no sirven de nada en un mundo donde lo único que suben son los precios.

¿Por qué es necesario un cambio en el sistema de desgravación en Euskadi?

Estos dos últimos motivos nos responden a la pregunta. En primer lugar, si los empleadores de trabajadores domésticos pudieran acceder a deducciones y desgravaciones por los gastos ocasionados por la contratación del servicio de asistencia domiciliaria, la regularización de los contratos laborales aumentaría significativamente. Si bien el medio es indirecto (no saldrían de la economía sumergida por razones éticas, sino económicas), podremos atajar un largo camino por la regularización de contratos de empleadas de hogar.

Si a ello le sumamos la situación desfavorecida que sufren muchos de los pensionistas, nos encontramos con un segundo motivo por el cual cambiar el sistema de desgravación en Euskadi. Tengamos en cuenta que ambos motivos se aúnan si notamos que una gran parte de los pensionistas ha trabajado de forma irregular en la limpieza de casas y cuidado de ancianos, por lo que estas personas sufrirían las consecuencias de ambas injusticias.

Cuidado de ancianos en Vizcaya: en Bilbao y Getxo

Domukea, como empresa de asistencia domiciliaria y servicio doméstico en Bilbao y Getxo (Vizcaya), considera imprescindible la reforma de la ley que regula las posibilidades de desgravación y deducción en España, con el fin de establecer el derecho de desgravar los gastos por asistencia a personas dependientes en todas las comunidades autónomas.

Como conocedora de la situación actual del sector de empleados de hogar y pensionistas, trabajadores y clientes de la empresa, Domukea considera necesario seguir el modelo andaluz ya mencionado, que permite cierto desahogo en el día a día de las personas mayores, dando un paso hacia delante en el reconocimiento de los derechos de los pensionistas y personas en riesgo de exclusión.

Con una llamada te hacemos la vida más fácil. Domukea