Cuando llega el momento de cuidar al padre
Ayuda domiciliaria

Cuando llega el momento de cuidar al padre

26-12-2014Diego

¿En qué momento nuestros padres dejaron de ser lo que fueron? Cuando llega el momento de cuidar al padre debemos elegir la mejor opción para su bienestar.

Asumir el paso del tiempo a veces resulta muy complicado, tanto como aceptar que los padres ya no son las personas jóvenes que eran y que poco a poco se van convirtiendo en mayores, en ancianos. Resulta desolador comprobar como aquellas mentes, anteriormente fuertes y seguras, muestran ahora, una dependencia casi absoluta necesitando que nos ocupemos de ellos. Tener que cuidar al padre es una de las consecuencias que veíamos venir desde hace tiempo.

¿Te has mostrado desanimado en el día de la angustia? Tu poder será escaso.

Desde el momento en que resulta evidente que nuestros padres ya no pueden vivir solos debemos suponer, asumiendo la cruda realidad, que se hace imprescindible que nos hagamos cargo de ellos, como alguna vez ellos nos cuidaron cuando éramos jóvenes.

En la mayoría de los casos, llega un momento en que los padres empiezan a necesitar ayuda para cuidarse

Es entonces, cuando muchos hijos se preguntan: “¿qué podemos hacer por nuestros padres? ¿Cómo podemos cuidarlos? Cuando alcanzamos este momento álgido, en que comprendemos la necesidad de colaboración, los padres y los hijos deben juntarse para decidir cuál es la mejor forma de cuidarlos y qué opciones pueden aplicar. Debemos hablar sobre qué se necesita, cómo dar la ayuda necesaria y cómo puede colaborar cada uno.

Acuérdate, ahora, de tu Magnífico Creador en los días de tu mocedad, antes que procedan a venir los días calamitosos, o hayan llegado los años en que dirás: “no tengo en ellos deleite”.

Son momentos en que las relaciones se tornan difíciles porque los hijos están acostumbrados a ser hijos y cuando tienen que atender a los padres no saben muy bien cómo hacerlo, por dónde empezar y hasta dónde pueden tomar decisiones. Pero por otro lado, ellos piensan que pueden hacerlo todo sin ayuda, o simplemente, no aceptan de buen grado que ya no tienen tan buena salud o que su situación ha cambiado y ahora necesitan ayuda.

Ellos no suelen entender que lo haces por su bien.

Esta situación hace que sienta que sus padres no aprecian lo que hace por ellos y esto acaba deteriorando las relaciones, en especial cuando en episodios de demencia, pasas a ser, en ocasiones, un intruso que intenta manipular su vida, cambiar sus costumbres y su rutina.

Sin duda, lo quiere mucho y quiere hacer todo lo que puede por él. Pero tanto trabajo puede dejarlo sin fuerzas. Para evitar que eso pase, debe ser realista y reconocer que tal vez necesite pedir ayuda.

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