Existen varios métodos para limpiar la moqueta: te explicamos los más sencillos
En algunos países del norte de Europa es muy común enmoquetar todas las estancias de la casa ya que aportan mucha calidez pero también es necesario limpiar la moqueta con regularidad para evitar la aparición de ácaros y suciedad, sobre todo en aquellos hogares en los que se convive con mascotas.
Así, lo más aconsejable es pasar la aspiradora de forma regular para quitar el polvo y la suciedad más superficial. En el caso de que la moqueta se manche por alguna causa, podremos aplicar varios métodos para limpiar la moqueta.
Productos específicos para limpiar la moqueta
Aunque existen empresas que disponen de maquinaria específica para limpiar la moqueta, el coste de este servicio puede ser inasumible. Así, en el caso de tener alguna mancha en la moqueta podemos utilizar un limpiador específico o productos de limpieza profesionales en función del tipo de mancha.
Por regla general, este tipo de productos se pueden aplicar directamente sobre la mancha o se pueden disolver en agua y aplicar posteriormente sobre la superficie a limpiar como opción más recomendable.
Una vez que se haya echado el producto sobre la mancha, es conveniente frotar suavemente con paño o un cepillo suave, para no dañar la textura, y después aclarar con otro trapo. Es importante que, una vez la mancha desaparezca, se seque bien la moqueta con ayuda de un secador o un paño, ya que la humedad podría estropearla.
Limpiar la moqueta con vapor
Otro de los métodos más utilizados para limpiar la moqueta es utilizar limpiadores de vapor, tipo vaporeta. Eso sí, antes de utilizar este tipo de aparatos siempre es recomendable pasar previamente el aspirador para retirar las partículas de polvo o cualquier tipo de residuo que pueda contener.
En el agua de estas vaporetas podremos echar algún producto de limpieza específico para moquetas y siempre adecuado en función del material de la moqueta y será aconsejable probar el producto en una parte pequeña y poco visible de la alfombra antes de que la dañemos entera de golpe.
Trucos caseros para limpiar la moqueta
Antes de comenzar la limpieza de la moqueta, será necesario saber de qué material está hecha. En función de su composición se utilizará el tratamiento más apropiado para evitar dañarla irreparablemente. Así, y una vez sepamos con qué material está fabricada la moqueta y el origen de la mancha podremos aplicar las siguientes mezclas de productos que habitualmente tenemos en casa:
- Disolvente para limpieza de alfombras en seco: estos productos que se pueden encontrar en droguerías son muy eficaces contra las manchas de betún, aceite o tinta.
- Vinagre blanco disuelto en agua con detergente neutro: esta mezcla casera viene muy bien para eliminar manchas de café, huevo, sangre, chocolate, leche o vino aunque con cualquier mancha líquida siempre es conveniente pasar un papel para absorber la mayor cantidad posible de líquido vertido.
- Amoniaco jabonoso disuelto en agua: se suele utilizar para limpiar las manchas de orina o vómito en moquetas acrílicas o poliéster.
- Alcohol diluido en agua: es una mezcla muy eficaz para limpiar las manchas de azúcar o pegamento.
- Hielo: las manchas de cera y chicle las podremos limpiar de la moqueta utilizando hielo en una bolsa y frotando suavemente en la mancha que queremos retirar. Nunca ponemos en contacto directo al hielo con la moqueta, siempre con una bolsa de plástico o un trapo. Para acabar con los restos que puedan quedar se podrá aplicar disolvente.
Servicios de limpieza y mantenimiento profesionales
La técnica más utilizada por las empresas de servicios de limpieza y mantenimiento, se desarrolla con maquinaria de inyección-extracción, consistente en la utilización de equipos que primero inyectan productos jabonosos a alta presión sobre los tejidos, cepillando y absorbiendo toda la suciedad y el agua sucia que va a parar a uno de los dos depósitos con que cuentan estas máquinas.
Siempre se procede como en todos los casos a un potente aspirado de la superficie, y se tratan las manchas concretas con la solución jabonosa de limpieza profesional, que utiliza la máquina.
En algunas ocasiones también se suele aspirar de nuevo una vez finalizada la limpieza de moquetas, para retirar posibles residuos jabonosos.
En definitiva, no debemos olvidar que, la base principal en el mantenimiento y limpieza de moquetas, es pasar la aspiradora de forma diaria, para extraer todas las acumulaciones de polvo, ya que no hay que olvidar que se trata de la superficie sobre la que se pisa, por lo que al igual que se barre y friega cualquier otro tipo de suelo cada día.
También deberemos tener en cuenta, como principio fundamental, que para limpiar la moqueta, será fundamental conocer el tipo de material del que hay que eliminar la suciedad, y cómo reacciona ante los distintos productos de limpieza.