¿Sabe que utilizando los productos correctos puede ahorrarse un montón de tiempo y de esfuerzo?
Comienza un nuevo viernes, un días más, pero no es así para todo el mundo. Los niños han empezado el colegio y los días se tornan más oscuros anunciando la llegada del otoño. Los detalles en las ventanas y espejos que destacaban cuando los rayos cruzaban las estancias de nuestra casa empiezan a pasar inadvertidos.
Cuando esa luz cruzaba las ventanas de nuestros hogares se podía ver claramente las huellas de los dedos, el polvo y lo opaco de los cristales.
Las huellas de las manos, las marcas de la nariz del perro, el polvo y la suciedad que se ha acumulado durante las vacaciones; tal vez, aprovechando la ausencia escolar de los niños podamos realizar una limpieza profunda de persianas, cortinas y por supuesto ventanas y espejos.
Hay infinitas razones para que las ventanas y espejos estén sucios, no importa con qué frecuencia lo limpia. Muchas personas se quejan de que los limpiadores de vidrio y las toallas de papel dejan manchas y pelusas, dejando el vidrio en una situación peor. No se preocupe, tenemos la solución a todos sus problemas.
No importa que productos utilice, evite tener que limpiar las ventanas cuando el sol incide directamente sobre el cristal o cuando haya un viento cálido y seco.
Limpiar los cristales y espejos de la casa siempre ha sido una tarea molesta, por la aparición de velos una vez acabada la faena. Por lo tanto, lo aconsejable es proveerse de los productos de limpieza adecuados, gracias a su efectividad.
Con la pistola atomizadora pulverizaremos directamente sobre la superficie a limpiar, a unos 25cm. Su adherencia en superficies verticales, evitará la rápida lágrima que siempre acaba manchando los marcos inferiores. Sin dejar secar, pasaremos con la ayuda de una bayeta de microfibra, hasta obtener el brillo deseado.
Su contenido en alcohol y agentes humectantes confieren un alto brillo y tacto agradable.
El empleo de una pistola atomizadora permitirá proyectar la cantidad de producto deseado, quedando el trabajo mucho más parejo, además de acabar antes de lo previsto. El empleo de productos de limpieza profesionales permite reaccionar rápida y energéticamente en cuanto vemos las huellas de los niños impresas en los espejos y ventanas de la casa. No solo conseguirá ahorrar tiempo, sino que además las estancias quedarán perfumadas con una agradable fragancia de coco.
Si necesita los servicios de un cristalero profesional no dude en contactar con Domukea sin compromiso.